Todos hemos sido principiantes alguna vez... piénsalo, incluso las más grandes leyendas del póker tuvieron que aprender cosas básicas como qué manos ganaban a cuáles, cuándo era su turno para apostar y no ir con todo sólo porque tenían un as. La curva de aprendizaje inicial de cualquier juego nuevo es siempre empinada, y esto se magnifica en el caso del póquer porque normalmente estamos jugando por dinero real Si no puedes pasar los primeros meses en la mesa de póker sin perder tu bankroll, entonces probablemente te rendirás.
Para ayudar a las futuras leyendas a superar esta "joroba de la inexperiencia" inicial, hemos elaborado unos cuantos errores muy comunes que aquejan a los jugadores de póquer novatos. Si puede evitarlos, estará en camino de convertirse en un jugador ganador en las mesas de póquer.
1. El póquer no consiste en ir de farol
Es cierto que casi todas las películas que se han hecho sobre el póquer se centran casi por completo en los faroles, en burlar psicológicamente a tu oponente y, esencialmente, en ser una gran leyenda en el proceso. PERO... el farol, si bien es una parte del póker, no es la más importante en absoluto. De hecho, muchos principiantes probablemente harían bien en jugar sin farolear en absoluto. Hacer un buen farol requiere una excelente capacidad de lectura del juego y una astuta capacidad de lectura del oponente.
Consejo 1: No haga un farol al azar a otros jugadores sin una buena razón para hacerlo.
Nota 1: Hacer un farol no es lo mismo que jugar de forma agresiva para intentar apartar a otros jugadores de manos marginales, por ejemplo, si está empatando una mano de algún tipo.
2. Jugar demasiadas o muy pocas manos
Muchos jugadores, cuando empiezan, entran en una de estas dos categorías. La primera es la de los "super-asustados". Debido a que se sienten inseguros o preocupados, jugarán literalmente sólo las primeras manos y apostarán sólo cuando sepan que van por delante. Estos jugadores suelen ir perdiendo fichas poco a poco con el tiempo y, con bastante rapidez, todo el mundo se dará cuenta de que sólo juegan las mejores manos y se retirarán cuando estén involucradas. El segundo es el tipo "súper flojo". Jugarán todo, sólo "porque sí".
No sea ninguno de estos tipos. La estrategia recomendada para los principiantes es jugar lo que se conoce como estilo "tight-agresivo". Deberías jugar principalmente manos premium, y deberías apostar en el lado duro. Una buena forma de obtener una guía sobre qué manos jugar es buscar en Internet "tabla de manos iniciales de póquer" o algo similar. Encuentre una "apretada" que le guste y pruébela. Sin embargo, recuerde siempre que debe introducir algunas manos inesperadas de vez en cuando, ya que no quiere ser demasiado predecible.
Consejo 2: Consiga una tabla de manos iniciales y manténgala junto a su ordenador (o apréndala antes de ir a las mesas de póquer)
Nota 2: Puede que tengas que apretar o aflojar dependiendo de tus oponentes.
3. No se convierta en una "estación de llamadas"
¿Conoces a esos jugadores que se limitan a igualar todo, nunca suben o apuestan fuerte pero siempre parecen estar en todos los botes? A estos jugadores se les llama "calling stations" y son casi definitivamente jugadores perdedores. Por lo general, ir al grano es menos rentable que apostar o subir. Esto se debe a que cuando se sube la apuesta existe la posibilidad de que el rival se retire, así como la posibilidad de que usted tenga la mejor mano. El término técnico para esto es "fold equity". Subir con manos fuertes también le permite construir el bote y obtener valor de sus manos raras.
Consejo 3: Subir suele ser mejor que igualar. (muchas advertencias aquí, por supuesto)
Nota 3: Jugar lento con manos masivas no suele ser una buena idea. Necesitas ganar grandes botes con grandes manos
4. Perseguir y emocionarse - ¡¡¡TILT!!!
El póker no es un juego emocional, por eso James Bond es tan bueno. Su nervio frío y su cabeza clara siempre ganan (además, extrañamente, siempre parece tener las mejores cartas...). Los principiantes a veces se frustran, se sienten engañados o creen que el póquer "no es justo", sobre todo después de una mala racha o de que el idiota que persigue un "runner runner" les supere. Pues bien, ¡muy mal! En realidad, el póquer es totalmente justo. Todo el mundo se ve superado a veces, y por igual (en un número infinito de manos) recibe cartas buenas y malas. Si te encuentras enfadado y persiguiendo pérdidas, abandona la mesa de póquer durante un rato. La mesa de póquer puede ser un lugar intenso y lo último que quieres hacer es ponerte tilt. La inclinación es el momento en el que pierdes totalmente la cabeza, emocionalmente. Empiezas a apostar todo agresivamente y te frustras cada vez más: ¡¡¡por qué todo conspira para hacerme fracasar!!! Arrgghhh!!!. Es una espiral descendente que no termina bien (créeme por experiencia).
Consejo 4: Si te encuentras enfadado o molesto, abandona la mesa de póquer.
Nota 4: Busca a otros jugadores en estado de inclinación - ¡ellos te darán su dinero!
5. No jugar correctamente la posición
Jugar correctamente la "posición" es vital para el éxito en el póquer. Para obtener más detalles sobre esto, consulte nuestra serie"En las mesas de póquer: Serie de estrategias 001 - La importancia de la posición". En él se explica qué es la posición, cómo utilizarla y por qué es tan importante
Consejo 5: Juega más manos en posición tardía que en posición inicial
Nota 5: Intenta sentarte a la izquierda (en posición) de los jugadores experimentados y, sobre todo, sueltos y salvajes.
El póquer es un juego sobre el que nunca dejarás de aprender. Es (casi) infinitamente granular. Sin embargo, primero tienes que interiorizar estos principios básicos, y hacerlo debería mitigar cualquier pérdida significativa, aumentar tu disfrute o el juego y acelerar tu graduación de principiante a intermedio y en adelante.
Buena suerte en las mesas de póquer